LOS CAPRICHOS DE LA VIDA

Hoy queremos compartir con vosotr@s dos pequeñas historias que, por un capricho del destino, se han entrelazado con ternura en este pequeño espacio que se llama «Algarabía». y es que hemos vivido uno de esos días intenso de emociones.
CATALINA una de las abuelitas más longevas de ASPAP, la Protectora de Animales de Salamanca, se apagaba. La rescatamos de un poblado marginal siendo jovencita. Era chuchita y muy tímida, intuimos desde el principio que formaría parte de nuestra familia muchos años, y así fue. Aunque se hacía viejita, nos demostraba cada día sus ganas de vivir y al llegar al nuevo refugio «Algarabía» revivió junto a nuestros otros abuelitos,. SCOOBY y TOBY. Pero en los últimos meses, y a pesar de la fuerte medicación, nuestra abuelita nos decía en cada mirada que se acercaba su viaje.
El mismo día asistíamos con asombro a otro acontecimiento, una nueva vida estaba saliendo al mundo en nuestra parcela de «Algarabía». Casi todos los días pasan por una parte de la misma las ovejas del pueblo. Nos gusta verlas y escucharlas con sus tintineos característicos. Ese día se quedó una solita muy cerca de nuestra puerta, y pensamos que se había despistado de las demás. Nuestra sorpresa cuando salimos a buscarla fue mayúscula, un pequeñín estaba naciendo en ese mismo momento. Con la boca abierta, por esta maravilla de la naturaleza que se llama VIDA, asistimos al acontecimiento completo. Enseguida el corderito se puso en pie y la madre le mimaba y limpìaba, digno de verse!! A las pocas horas volvieron las ovejas y esta mamá se incorporó al rebaño junto a su pequeñín.
A la vez nuestra abuelita CATALINA, tranquila y con nuestras caricias, iba dejando de respirar, y como bien dijo nuestra veterinaria, seguro que parte de esa energía que se escapaba de CATALINA formaba ya parte de la nueva vida nacida en «Algarabía». Las casualidades existen y a veces cargadas de simbolismo y esperanza.
Mirando al cielo y despidiéndonos de nuestra fiel compañera damos la bienvenida a este chiquitín. Ojalá podamos verte crecer…..


