KOKO
KOKO llegó al refugio de ASPAP con poco más de un año, y sus rescatadores, en este caso los Bomberos de Salamanca, tardaron un tiempo en poder cogerle.
Koko estaba abandonado pero era un perro muy tímido y no se acercaba a nadie, pero sí se refugiaba cerca de sus instalaciones, asique le estuvimos poniendo allí comida y agua para que fuera cogiendo confianza y sintiera aquél sitio como seguro. Un día se dejó acariciar un poquito y aprovecharon para cogerle.
Koko sigue siendo un perro muy tímido en las distancias cortas con la gente que no conoce, sin embargo cuando está en su recinto y se le ofrecen chuches se acerca confiado y contento y regala a todo el mundo una gran sonrisa.
En el refugio cada perrillo tiene su carácter y el de Koko necesitará de una familia paciente, que sepa acercarse a él poquito a poco, que le ayude a perder el miedo a lo «desconocido», y aunque ésto parece complicado, no lo es. Los perros que son tímidos al principio se convierten en los mejores compañeros.
A pesar de su timidez, es un perro muy alegre, cuando ganas su confianza le encantan los mimos y tiene un olfato especial para descubrir las chuches ocultas. Amig@s y voluntari@s, cuidado con lo que guardáis en los bolsillos y donde dejáis las salchichas y galletas, porque nuestro Koko y su inseparable Elka os vigilan….